Una estancia totalmente negra cubría alrededor todo lo que el horizonte podía mostrar. Montañas suelo, muros, piedras, todo era negro. De duropord negro. Un universo extraño que escuchaba mis pasos por donde quiera que fuera. En el suelo polígonos de varios lados se comenzaron a formar. Esos polígonos se convirtieron en figuras geométricas, en pirámides que cubría la luz grisácea que venía del sol. Continué mi camino, las pirámides se invirtieron y se convirtieron en abismos. Como los remolinos de mar, me halaban, me atrapaban en un orbita extraña contra mi voluntad. Unos pequeños monstruos de apariencia amigable me empujaban el más grande era del tamaño de mi mano. Como Gulliver pensé, la idea me hizo despertar.
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Significado
Soñar una pirámide de cualquier cultura antigua anuncia cambios importantes en la vida del soñante.
Soñarse subiendo una pirámide, tenga o no escaleras, anuncia que deberá trabajar mucho y viajar antes de lograr lo que desea.
Otros aseguran que este sueño puede presagiar casamiento de un soltero con una mujer que no comulga con sus ideas religiosas, o el abjurar de su fe, o que es un ser que se dedica a las letras, las artes, el estudio de la cosmogonía, a las ciencias esotéricas. Indica asimismo longevidad, lugares de diversión, juegos, bailes, tabernas, iglesias, fábricas textiles.
Soñar con Pirámide Invertida
Etapa especial para proyectar el futuro, hay optimismo, suerte y claridad mental, además de buena fortuna que acerca el dinero fácilmente. El hecho de que esté invertida no es señal de nada malo, en realidad es la primera forma de una pirámide.
Soñar con abismos
Soñar una enorme profundidad es siempre un aviso de peligros cercanos. Lo mejor que se puede hacer después de uno de estos sueños es mantenerse alerta, vigilante; pero siempre sereno, en espera de lo que el sueño haya querido anunciar. Por lo general estos sueños, cuando son premonitorios, no tardan en revelarse más de dos semanas.
Soñarse a la orilla de un precipicio o abismo suele ser advertencia de que algunos enemigos tratan de hacerle daño.
Soñar profundidades o abismos también sugiere que el soñante se encuentra en un estado anímico alterado, tal vez depresivo, y si no se atiende podría sufrir serios choques psíquicos o pánico casi por cualquier motivo.
Soñar que cae en un precipicio es anuncio que ha descuidado algo y que por ello puede ser fácil víctima de estafa o sufrir enfermedades delicadas.
Advierte sobre peligro de accidentes, de atropellamientos por vehículos, de ataques por sorpresa como son los asaltos.
Si al estar mirando cae en la profundidad, puede significar que pronto sufrirá disgustos y se sentirá decepcionada de ciertas amistades o amores.
Si caemos en él nos avisa de un final desastroso de cualquier índole.